La crisis climática que estamos viviendo ha empujado a la comunidad internacional a adquirir el compromiso de alcanzar el cero neto de emisiones entre 2050-2060.
Un objetivo que implica la descarbonización del modelo energético con nuevas soluciones y tecnologías renovables y sostenibles.
Genia Global ha asumido ese compromiso desde un principio, bajo la premisa de querer cambiar el mundo y la forma en la que las personas y las empresas entienden el uso y la gestión de la energía, proponiendo nuevos modelos y tecnologías, para descarbonizar el sistema energético con soluciones de economía circular.
Esta premisa nos ha llevado a desarrollar proyectos tanto para el mercado español como internacional, que permiten utilizar y valorizar los recursos disponibles, empleando las últimas tecnologías y poder así avanzar hacia un desarrollo global sostenible.
Algunos de estos proyectos son los desarrollados por nuestra línea de negocio Genia Bioenergy, llevando el desarrollo de la tecnología del biogás y el biometano más allá de nuestra frontera.
Primeros pasos: la mayor planta de biogás monosustrato de Europa
Uno de los primeros proyectos internacionales (2014) fue el diseño de la mayor planta de biogás monosustrato de Europa, ubicada en la Región de Poltava (Ucrania).
La planta se encuentra integrada en una planta de producción de azúcar de ASTARTA HOLDING y cuenta con 4 digestores y 2 post-digestores, con un volumen total de 31.500m3.
El sistema se ha desarrollado de forma que permite incorporar más de 45 t/hora de pulpa de remolacha, siendo capaz de soportar una dieta monosustrato.
La producción de biogás inicial alcanzaba los 7000 m3/hora (313.6 GWht/año), lo que permitía cubrir hasta el 75% de la demanda térmica de la fábrica de azúcar.
El digestato que se genera se utiliza como fertilizante orgánico en las parcelas agrícolas, cerrando el ciclo del carbono.
A día de hoy, el complejo bioenergético de ASTARTA se integra en un cluster formado por una empresa agrícola y plantas procesadoras de azúcar y soja.
La planta de biogás utiliza como materia prima la pulpa de remolacha, estiércol de granjas lecheras y desechos de otras instalaciones de producción. De esta forma se cubre la temporalidad del aporte de pulpa de remolacha, al solo operar la planta de azúcar durante 2 o 3 meses al año.
El biogás generado (60 millones m3/año) abastece a la planta azucarera durante la temporada de procesamiento de remolacha azucarera y, el resto del año, atiende las necesidades de la planta procesadora de soja.
Esta planta de biogás resulta beneficiosa para ASTARTA, aportándole ahorros en el consumo de gas natural, una mayor rentabilidad y eficiencia energética, al tiempo que la hace más sostenible.
El reto Evercreech: una gran instalación con 5 biodigestores
El diseño de la planta de biogás en Evercreech (Reino Unido) ha supuesto todo un reto debido a la complejidad de la instalación, con 5 biodigestores, alimentados con diferentes tipos de residuos, tanto industriales como agrícolas.
La planta tiene la capacidad de procesar cada año 35.300 t de residuos agrícolas y 50.500 t de residuos de la industria alimentaria. En total, unos 85.800 t de residuos orgánicos cada año (el equivalente a los residuos generados por una ciudad de 150.000 habitantes).
Esto implica que, cada día, la planta procesa 880 t de residuos orgánicos y genera 2.700 m3/h de biogás, además de 184 m3 de fertilizante orgánico líquido al día. Al año se producen 67.000 t de fertilizante líquido y compost.
Uno de los retos tecnológicos afrontados por Genia Bioenergy en el diseño de este proyecto han sido las soluciones técnicas aportadas en la optimización del aprovechamiento térmico.
El calor desprendido por los gases de escape y las camisas de refrigeración de los motores de cogeneración es aprovechado en el proceso de pasteurización de la materia prima y los digestatos, permitiendo optimizar el diagrama de masas y energías, y generar un ahorro notable en los costes de operación de la planta.
La planta está en funcionamiento desde septiembre de 2022 e incorpora tres unidades de pasteurización, una unidad de cogeneración, cuatro digestores primarios, un postdigestor y un tanque de almacenamiento de digestato. Esto la hace versátil para manejar flujos de residuos líquidos, sólidos y semisólidos.
Además, la instalación cuenta con los permisos para inyectar 1.000 m3/h de biometano a la red de gasista, suficiente para abastecer a más de 8.000 hogares.
La planta, ubicada en un polígono industrial local, reducirá enormemente el desperdicio de alimentos que actualmente se envía a los vertederos, al tiempo que contribuirá a la producción de gas renovable.
Energía renovable y desarrollo económico rural en Honduras
Dentro de los proyectos internacionales, resultan especiales los desarrollados en Honduras, donde se han diseñado e instalado dos microrredes de energías renovables que combinan energía solar fotovoltaica y la gasificación de biomasa.
Ambos proyectos han sido financiados por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), con aportaciones de otras ONG, y la colaboración de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y las empresas valencianas Vestel, Monsolar y Genia Bioenergy.
El primer proyecto de microrred de energía renovable se llevó a cabo en la pequeña comunidad rural de El Santuario, en pleno Corredor Seco Mesoamericano, una de las zonas más expuesta a agentes climatológicos extremos (grandes sequías en alternancia con lluvias torrenciales), donde viven 3.5 millones de personas en situación de riesgo humanitario, un 40% de las cuales ubicadas en Honduras (FAO, 2016).
Esta primera instalación, en funcionamiento desde el 2022, suministra energía limpia suficiente para las labores domésticas y agrícolas de los 500 habitantes de la comunidad.
También cubre las necesidades de los hogares de la localidad, abastece de iluminación en los espacios comunes y permite nuevos procesos productivos, al hacer posible la refrigeración de alimentos y su procesado con maquinaria.
La segunda instalación se ha llevado a cabo en la comunidad rural de Torrecilla, también del Corredor Seco Mesoamericano, y combina tres plantas solares fotovoltaicas de 40, 12 y 14 kWp y un gasificador de biomasa de 25 kW. La instalación es gestionada de forma inteligente para suministrar energía limpia suficiente para las labores domésticas y agrícolas de los habitantes de la comunidad.
El uso de la biomasa para generar gas servirá, además, para frenar el consumo de leña (10-20 kg/día por vivienda) que acaba generando problemas de deforestación y de salud para los habitantes.
Se espera que este tipo de proyectos se continúe replicando y escalando en otras comunidades rurales aisladas.
Un hito más reciente: una planta de biometano de tercera generación en Leiria, Portugal
Como último ejemplo de internacionalización y uno de los hitos más recientes que la compañía ha logrado, tenemos el proyecto de planta de biometano de tercera generación para el municipio de Leiria (Portugal).
El acuerdo firmado por Genia Bioenergy, Ambilis (Asociación de ganaderos porcinos) y la Cámara Municipal de Leiria, implica el diseño e instalación de una planta de biometano que procesará las deyecciones ganaderas generadas en las granjas porcinas, vacunas y avícolas del distrito.
La instalación contará con la tecnología de Biorganics Materials que permitirá la obtención de biometano, agua regenerada, enmiendas orgánicas y fertilizantes de primera calidad.
Con esta planta de biometano se crearán 50 puestos de trabajo directos y se generarán 107 GWh/año de biometano, suficientes para cubrir el 35% de las necesidades del municipio de Leiria. Además, se evitará la emisión de alrededor de 320.000 toneladas de CO2/año, al procesar casi la totalidad de la producción de deyecciones ganaderas del distrito.
El proyecto, que está en tramitación, podrá estar acabado en 2025, aportando una solución a la gestión y valorización de las deyecciones ganaderas del municipio, algo que Leiria buscaba desde hace tiempo.
En Genia Global creemos en un pensamiento diferente sobre la generación, uso, aprovechamiento y gestión de energía. Por esto proponemos nuevos modelos y tecnologías que permiten que evolucionemos como sociedad de una manera sostenible. ¡El futuro es ahora!