Amazon

¿Te hubiese gustado invertir en el sector de la gran distribución online antes de 2017 y su extraordinaria subida en bolsa?

El gran inversor Warren Buffett no lo hizo. Luego, se arrepintió y tuvo que comprar las acciones a posteriori, cuando su valor ya había superado los 1.000 dólares por acción y su revalorización, respecto al debut bursátil en 1997, era superior al 5.000%.

 

Y es que esta empresa, que nació de la mano de Jeff Bezos como una tienda de libros online, en 1994, desde un garaje y con un capital inicial de apenas 10.000 dólares, no ha dejado de crecer.  

La idea de Bezos era montar una tienda que vendiera lo que más demandaban las personas en ese momento. Los libros eran uno de los cinco productos con potencial en su época, junto a los CD’s de música, vídeos, ordenadores y programas de software.

Unos meses después de su lanzamiento como Amazon.com, ya vendía en todos los estados del país y en 45 países más. Un año más tarde, el número de visitantes diarios había ascendido a 2.000.

Esas visitas se convirtieron en 80.000 en 1997, tal como se indicaba en las métricas que habían incluido en su formulario de información con fines de cotización. Una forma de destacar su liderazgo.

En este mismo formulario, se dejaba clara cuál era la actividad de la empresa. Por aquel entonces, una organización mucho más simple de lo que es ahora: “Amazon.com es el minorista líder online de libros”.

A partir de su salida en la bolsa de valores Nasdaq, con una cotización inicial de 18 dólares la acción y un valor en el mercado de 300 millones de dólares, Amazon se expande, del mismo modo que crecía su demanda.

La empresa amplia su red de instalaciones a lo largo y ancho de EEUU y diversifica su oferta, incluyendo los CD’s y DVD’s, además de libros.

A finales de 1999, el valor de las acciones ya estaba en 106 dólares, una subida de aproximadamente un 500% desde su precio inicial.

Esto provoca cierto nerviosismo entre los inversores y operadores de bolsa debido a que los precios del sector tecnológico estaban sobre extendidos al alza. ¿Se trataba Amazon de una burbuja bursátil?

Es en ese momento, entre 1999 y 2000, cuando estalla la burbuja de las punto-com., Amazon sufre también esta crisis con una caída de sus acciones hasta los 6 dólares por acción.

Muchas empresas punto-com no sobrevivieron a esta embestida, pero Amazon consigue mantenerse en pie. Esto se debe a que tenía un producto, un modelo de ingresos y clientes que ya patrocinaban sus productos. No como otras punto-com, detrás de las cuáles no había más que humo.

A partir de ahí, Amazon se asocia con varias empresas de ropa importante, gracias a lo cual, comienza a ofrecer hasta 400 marcas de ropa. La compañía ya no es solo una tienda de libros online.

A la ropa se le fueron sumando dispositivos electrónicos, juguetes, utensilios de cocina e incluso suscripciones a revistas.

Con esto, la empresa comienza a generar ingresos adicionales al otorgar licencias de su plataforma a otros sitios de comercio electrónico, como Borders.com o Target.com.

En 2002, la compañía alcanzó rentabilidad por primera vez y no ha vuelto a mirar hacia atrás desde entonces.

El historial del valor de las acciones de Amazon ha sido de un constante incremento, algo que difícilmente ha logrado alguna otra corporación industrial.

Los inversores, más que ver una empresa online, estaban observando cómo rediseñaba el futuro del mercado online un auténtico gigante tecnológico.

Después de la Crisis Financiera Internacional 2008-2009 y la vuelta de los inversores a los mercados bursátiles estadounidenses de ese momento, Amazon se encontraba en una buena posición. Fue entonces cuando lanzo su famoso programa Amazon Web Services (AWS), productos como el dispositivo Kindle, que alcanzó gran popularidad, y expandió de forma radical su paquete de productos de logística y computación en la nube.

Debido a esto, sus acciones comenzaron a experimentar un aumento meteórico en 2015, alcanzando máximos históricos a finales de 2017 y principios de 2018, que superaban los 1.300 dólares por acción. Un crecimiento que no ha cesado, estando ahora el valor de sus acciones por encima de los 3.000 dólares.

 

¿Qué inversor no iba a estar interesado en una empresa a la que le está yendo tan bien con sus expansiones, mientras hace crecer su negocio insignia?

Este rápido crecimiento de Amazon se debió a los productos de servicios Web que ofrecía y a que su estructura comercial comenzó a centrarse en aspectos como invertir en tecnología nueva y emergente, modelos comerciales disruptivos (ej. Uso de drones en paquetería), la diversificación de su base de productos y servicios, y la expansión de su base de clientes para incluir grandes empresas y gobiernos.

En Genia también invertimos en las últimas tecnologías y avances de la actual revolución tecnológica, para poder trabajar dentro de un modelo inteligente de desarrollo sostenible, que nos permita llegar al siguiente nivel como sociedad.

 

Con Genia Energy Solutions, ahora es el momento de que formes parte del cambio.

¿Quieres contactar con nosotros?